Cada vez más, y sobre todo con el paso del tiempo, estamos muy preocupados por lucir una piel bonita, tersa y con luz, así como paliar el paso del tiempo y prevenir esas arruguitas que tanto nos incomodan. La utilización de productos de belleza tales como cremas anti edad, peelings y tónicos son fundamentales para tener una piel bonita, pero, además de cuidar nuestro cutis desde afuera, lo debemos de hacer desde adentro.

Es por eso que una alimentación equilibrada y saludable es la base para lucir una piel radiante, pero hay alimentos que no deben faltar en nuestra dieta, ya que sus propiedades potenciarán los efectos de los cosméticos en nuestra piel.

Para esto te dejamos una lista con algunos de estos alimentos:

Agua: Aunque no lo contemplamos alimento como tal, es vital para tener una piel hidratada y es recomendable beber entre 1.5 y 2 litros de agua al día para mantenernos hidratados por dentro, así como por fuera, ya que el agua ayuda a proteger la capa más superficial de la epidermis de las agresiones del entorno.

Brócoli: Es uno de los vegetales más indicados para desintoxicar nuestro organismo y eliminar toxinas de nuestra dermis, así como uno de los alimentos más saludables que existe. Contiene vitaminas A, B, K y E, además de Omega 3 y posee un gran antioxidante perfecto para proteger nuestra piel de los daños de la exposición solar y mantener una piel limpia, joven y bonita.

Pimiento rojo: Gracias a las vitaminas, fibras y carotenoides que contiene, previene y reduce las arrugas ayudando a estimular la circulación de la sangre hacia la piel, además, su consumo nos ayuda a tener una piel más tersa, joven y luminosa. 

Cereales integrales: La gran mayoría de ellos contiene una gran cantidad de selenio, uno de los antioxidantes más beneficiosos que mejora la elasticidad en las capas más externas de la piel actuando como agente anti-envejecimiento natural y ofreciendo una piel radiante.

Zanahoria: Nutre, hidrata, repara, humecta y otorga color a la piel, posee una gran cantidad de betacarotenos que son unos pigmentos que se convierten en el organismo en retinol o vitamina A, protege la piel de los rayos UV, ya que ayuda a tomar los rayos buenos del sol protegiendo la piel de los rayos dañinos, además, su consumo ayuda a fortalecer el cabello y las uñas.

Avellanas: Son una gran fuente de vitamina E y son libres de radicales libres que causan el envejecimiento prematuro.

Pescados azules: Salmón, sardina, atún, trucha, bonito, nos aportan una mayor permeabilidad a las membranas lo que conlleva un mejor funcionamiento celular. 

Semillas de calabaza: Son ricas en vitamina E, fuente de magnesio, proteínas y selenio, uno de los alimentos más nutritivos que existen aportando a nuestra piel humectación y ayudando a prevenir las arrugas, así como las manchas de la edad y las producidas por el sol. 

Frutas de verano: Poseen una gran cantidad de antioxidantes y son una gran fuente de vitamina C. 

Chocolate puro: El chocolate puro, que contenga más del 70% del cacao, contiene flavonoides, ácidos grasos y antioxidantes.

Recuerda que si incluimos estos alimentos en nuestra dieta en un breve periodo de tiempo notaremos cómo evoluciona nuestra piel sintiéndola más tersa, joven y radiante.

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