También conocido como el oro líquido en el mundo de la estética, el aceite de argán contiene vitamina E, antioxidantes y ácidos grasos Omega 3, lo que lo hace una gran fórmula para el cuidado de la piel.

Los usos de este compuesto extraído de las semillas del árbol de argán son muy variados, incluyendo medicinales, pero a continuación de contamos los principales para el cuidado de la piel:

• Combate el exceso de grasa, ya que el efecto astringente resulta muy útil para eliminar el exceso de grasa en la piel.
• Es antiinflamatorio y antibacteriano, puede ser usado como tratamiento antiacné ya que, a su capacidad para absorber grasa se unen estas dos propiedades que permiten que se limpien en profundidad los poros.
• Ayuda a retener la humedad de la dermis, lo que multiplica sus resultados, convirtiéndolo en un plus para la hidratación
• Su alto contenido en vitamina A y E contribuyen a que se estimule la reparación celular natural de la piel, aumentando también la elasticidad de la piel.
• Funciona como calmante natural para pieles irritadas por el sol o después de un proceso depilatorio.

Hay ciertas partes de nuestro cuerpo que sufren un deterioro especialmente marcado y en concreto, nos referimos a las manos y a los pies. Por esto los beneficios que te mencionamos anteriormente son más que positivos para combatir la sequedad excesiva que se da en la dermis de estas dos zonas. Además, si eliges una mascarilla de manos, así como de pies, vas a conseguir que sus propiedades antioxidantes proporcionen un aspecto rejuvenecido y será efectivo contra las durezas.