El ser humano solo puede asimilar el silicio en su forma orgánica, y existe en casi todas las partes del cuerpo humano, con la que nuestro organismo es capaz de crear tendones, cartílagos, uñas, huesos, dientes y músculos. El silicio orgánico es utilizado en tratamientos cosméticos, ya que tiene la capacidad de restaurar las arrugas y flacidez de la piel, de fortalecer las uñas y la capacidad de aportar vitalidad al cabello.
A partir de los 35 años se reduce el nivel del silicio, por ello aportar una dosis es necesario para mantener la función celular en niveles óptimos. Por esta razón, contar con una concentración adecuada de este compuesto en el organismo es sinónimo de buena salud y bienestar.
– Cabello, piel y uñas dañadas: El aporte de silicio devolverá la consistencia tanto al cabello como a las uñas. Además, reduce las arrugas en la piel y ayudando a reconstruirla.
– Arrugas y flacidez en la piel: Este compuesto actúa como un pegamento, ayudando a mantener las estructuras corporales fuertes y flexibles.
– Huesos frágiles y dientes sensibles: La integridad de la matriz ósea depende de que los niveles de silicio sean los adecuados, ayudando a recuperar dicha masa con el paso de los años. De igual modo, una carencia de este compuesto se asocia con la aparición de caries.
– Hipertensión y falta de flexibilidad en las arterias: Este compuesto interviene a medida que protege la pared arterial, disminuye los niveles de colesterol y reduce la presión arterial.
– Patologías del sistema nervioso: Los niveles óptimos de este compuesto en el organismo ejercen una acción positiva sobre los neurotransmisores, mejorando la comunicación celular.
– Taquicardias y arritmias: Un buen nivel de silicio provoca que en la parte del corazón donde se originan las cargas eléctricas que impulsan cada latido se disminuyan las arritmias y taquicardias.
– Sensación de cansancio: Este compuesto es uno de los encargados de restablecer la polaridad de las células, ayudando a equilibrar el organismo, devolviendo la energía y vitalidad perdidas