Controlar las consecuencias de los cambios hormonales durante la regla es posible.
Durante nuestro período, debido a las variaciones hormonales del ciclo ovárico puede aumentar la producción sebácea, lo cual se manifiesta en granitos inesperados y un tono más opaco en la piel. Por suerte existen una serie de pequeños trucos para que nuestra piel y nuestro semblante no se vea tan afectado.
Alrededor de 10 días de tener la regla, la tasa de hormonas empieza a decaer, por lo cual empezamos a retener agua y eso se ve reflejado bajo los ojos, en las famosas bolsas. Aquí es el momento ideal para realizarse un masaje profesional o casero en el rostro para que drene los tejidos, aplicando una leve presión del interior hacia el exterior.
Los dos o tres días antes de que llegue la regla, la piel empezará a sentir estragos, verás puntos negros multiplicarse y sentirás la piel visiblemente más grasosa. En este momento debes de recurrir a la ayuda de una rutina de belleza más enfocada y rigurosa de lo normal.
Un excelente aliado para estos días previos son los cepillos que eliminan células muertas que alise la epidermis, sin pasarse de fuerza con la piel. También puedes utilizar mascarillas a base de arcilla que ayudará a minimizar los poros.
Durante el periodo solo es necesario hidratar, ya que las hormonas se encuentran en su punto mínimo y esto solo quiere decir una cosa: sensibilidad e inflamación. Debemos de aplicar productos a base de ácido salicílico que ayudará a la renovación celular.